Un total de 141 personas, entre ellas 132 niños, murieron en un atentado talibán contra una escuela para hijos de militares en Peshawar, en el ataque terrorista más sangriento de la historia del país, anunció el ejército.

El anterior récord se remontaba a diciembre de 2007, cuando murieron en un atentado en Karachi (sur) 139 personas, entre ellos la ex primera ministra Benazir Bhutto, que acababa de volver a Pakistán.

En el atentado cometido este martes por un comando talibán resultaron heridas 124 personas, de las cuales 121 eran niños, precisó el portavoz del ejército, el general Asim Bajwa, en una rueda de prensa en Peshawar (noroeste).

Según él, “los terroristas empezaron a disparar de forma indiscriminada en cuanto entraron en la escuela, y no tenían ninguna intención de tomar rehenes”.

Los asaltantes “llevaban todos chaquetas suicidas (llenas de explosivos), municiones y comida para varios días”, añadió el portavoz, que no sabía cuántos fueron abatidos por las fuerzas del orden ni cuántos se hicieron estallar.

El general reafirmó la determinación del ejército de derrotar el terrorismo.

“No hay ocasión más apropiada para hacer frente a nuestras responsabilidades”, concluyó.