Ciudad de México, a 24 de marzo de 2017:-: Como orgullosa militante del Partido de la Revolución Democrática, me preocupa la crisis que está poniendo en riesgo no solo los principios que le dieron origen desde la perspectiva de las mejores causas ciudadanas y sociales por la libertad y la justicia; sino la vigencia misma de la propia institución y de nuestro grupo parlamentario en la Cámara Alta que se han visto demeritados ante una serie de hechos que ponen a nuestro partido en el ojo del huracán.

Sin lugar a dudas, tenemos que replantearnos y defender los motivos de la izquierda desde su más pura esencia, que es la democracia verdadera, la lucha por los derechos y la igualdad. En los últimos años, se han dado circunstancias que han distanciado a simpatizantes destacados de la izquierda, lo que ha provocado rupturas que hoy por hoy nos ocupan.

Por lo anterior, considero que la inestabilidad generada por declaraciones prematuras sobre el apoyo a uno u otro candidato, me lleva a expresar con claridad mi posición política, misma que fue base del voto que, como integrante del Grupo Parlamentario del PRD en el Senado de la República, emití y cuyo sentido es:

  1. a) Defender la unidad e institucionalidad del Grupo Parlamentario del PRD como eje de una agenda parlamentaria progresista y de izquierda; que urge a la nación y seguiremos trabajando.
  2. b) Manifestar mi respeto personal, solidaridad y respaldo a mis compañeros senadores integrantes de nuestro grupo parlamentario más allá de las decisiones políticas de cada uno.